Si sueñas con ver leones de cerca, perderte en la sabana y sentir que el mundo se detiene bajo un cielo inmenso, un safari en Kenia y Tanzania es la aventura que necesitas. No hace falta ser un explorador curtido ni dejarse el sueldo en un viaje de lujo: con un poco de planificación, cualquiera puede organizar su primer safari africano y vivir una experiencia auténtica, emocionante y, sobre todo, inolvidable. Aquí va mi guía sin filtros, con consejos prácticos, rutas recomendadas y respuestas a esas preguntas que todos nos hacemos antes de lanzarnos a la aventura.
¿Por qué elegir Kenia y Tanzania para tu primer safari?
Si hay dos países que concentran la esencia del África salvaje, son Kenia y Tanzania. Aquí tienes la mayor concentración de animales del continente, parques nacionales legendarios y paisajes que te dejan sin palabras. Además, son destinos bien preparados para viajeros primerizos: hay infraestructuras, guías experimentados y opciones para todos los bolsillos. Y, lo más importante, la posibilidad de ver la Gran Migración, ese espectáculo brutal de millones de ñus y cebras cruzando el Serengeti y el Masai Mara, solo pasa aquí.
¿Cuál es la mejor época para hacer un safari en Kenia y Tanzania?
La pregunta del millón. La mejor época depende de lo que quieras ver, pero en general, la temporada seca es la más recomendable para un primer safari. En Kenia y Tanzania, la temporada seca va de junio a octubre. En estos meses, la vegetación está más baja y los animales se concentran en los pocos puntos de agua, así que es más fácil verlos. Si tu sueño es presenciar la Gran Migración, apunta agosto y septiembre para el Masai Mara (Kenia) y enero-febrero o junio-julio para el Serengeti (Tanzania). Evita abril y mayo si puedes: llueve mucho y algunos caminos se vuelven impracticables.
¿Qué parques nacionales no te puedes perder?
Aquí van los imprescindibles para un primer safari en Kenia y Tanzania:
- Masai Mara (Kenia): El rey de los safaris. Paisajes de película, leones a patadas y, si tienes suerte, la Gran Migración. No te pierdas un amanecer en globo: caro, pero de los momentos que no se olvidan.
- Serengeti (Tanzania): La sabana infinita, manadas de elefantes, leones cazando al atardecer… Aquí se siente el África de los documentales.
- Ngorongoro (Tanzania): Un cráter volcánico lleno de vida. Es fácil ver los “Big Five” (león, leopardo, elefante, búfalo y rinoceronte) en un solo día.
- Amboseli (Kenia): Elefantes gigantes con el Kilimanjaro de fondo. El típico paisaje de postal, pero real.
- Tarangire (Tanzania): Menos famoso, pero con baobabs espectaculares y mucha fauna en temporada seca.
¿Mejor safari organizado o por libre?
Para un primer safari, lo más sensato es contratar un tour organizado, al menos la parte del safari. Puedes buscar agencias locales (suelen ser más baratas y auténticas) o reservar desde España si quieres ir sobre seguro. Hacerlo por libre (alquilando 4×4 y conduciendo tú) es posible, pero solo lo recomiendo si tienes experiencia conduciendo fuera de Europa y te manejas bien con mapas y rutas de tierra. Además, los guías locales conocen los mejores rincones y te ayudan a ver animales que tú ni detectarías.
¿Cuánto cuesta un safari en Kenia y Tanzania?
La pregunta clave. Un safari no es barato, pero tampoco tiene por qué ser un lujo inalcanzable. Calcula unos 1500-2000 euros por persona para una semana de safari clásico (incluyendo traslados, alojamientos, entradas a parques y comidas). Si quieres algo más exclusivo (lodges de lujo, vuelos internos, guía privado), la cifra puede subir mucho. Hay opciones más asequibles: safaris en grupo, alojamientos tipo camping o tented camps sencillos. Eso sí, huye de chollos sospechosos: si es demasiado barato, probablemente recortan en seguridad, guías o trato a la fauna.
¿Qué llevar en la maleta para un safari?
Olvídate de las camisas de explorador de anuncio y céntrate en lo práctico:
- Ropa cómoda y transpirable en tonos neutros (beige, verde, marrón). Nada de colores brillantes ni blanco nuclear.
- Una chaqueta ligera para el amanecer y la noche (en la sabana refresca más de lo que imaginas).
- Gorra, gafas de sol y protector solar.
- Prismáticos (imprescindibles para ver animales a lo lejos).
- Cámara con buen zoom o móvil con teleobjetivo.
- Repelente de mosquitos y botiquín básico.
- Sandalias y zapatillas cerradas cómodas.
- Cargadores y adaptador de enchufe tipo G (el británico) para Kenia y tipo D/G para Tanzania.
- Una mochila pequeña para el día a día.
¿Es seguro hacer un safari en Kenia y Tanzania?
Sí, siempre que sigas las indicaciones de los guías y uses el sentido común. Los parques nacionales están bien gestionados y los incidentes con animales son muy raros si no haces locuras (nada de bajarse del coche por tu cuenta, ni acercarse a los animales para la foto). En las ciudades grandes, aplica las precauciones habituales: no muestres objetos de valor, usa taxis oficiales y evita pasear de noche por zonas poco iluminadas. En cuanto a salud, es recomendable vacunarse de fiebre amarilla y llevar la profilaxis contra la malaria. Consulta siempre en tu centro de vacunación internacional antes de viajar.
¿Cómo moverse entre Kenia y Tanzania durante el safari?
Si quieres combinar ambos países, lo más fácil es cruzar por carretera entre el Masai Mara y el Serengeti, usando el paso fronterizo de Isebania. La mayoría de agencias lo gestionan y te cambian de vehículo/guía en la frontera. Otra opción es volar de Nairobi (Kenia) a Arusha o Kilimanjaro (Tanzania), aunque suele salir más caro. Entre parques, los traslados suelen ser en 4×4 o minivan. Prepárate para trayectos largos y baches: forma parte de la aventura.
¿Dónde dormir durante el safari?
Hay opciones para todos los gustos y presupuestos:
- Lodges: Hoteles en plena naturaleza, con todas las comodidades. Algunos son auténticos caprichos.
- Tented camps: Tiendas de campaña fijas, con baño privado y camas. El equilibrio perfecto entre aventura y confort.
- Camping: Para los más valientes y ahorradores. Dormirás rodeado de sonidos salvajes, pero con menos comodidades.
Mi consejo: combina tented camps y algún lodge especial para darte un homenaje. Reserva con antelación, sobre todo en temporada alta.
Consejos prácticos para disfrutar al máximo tu primer safari
- No te obsesiones con ver los “Big Five” el primer día. Disfruta de cada avistamiento, desde un elefante hasta un pájaro raro.
- Pide siempre a tu guía que pare el motor en los avistamientos: la experiencia de silencio es brutal.
- Lleva baterías de sobra y una tarjeta de memoria grande. Vas a hacer más fotos de las que imaginas.
- Pregunta todo lo que se te ocurra. Los guías saben muchísimo y les encanta compartir historias.
- Respeta las normas y la distancia con los animales. Ellos son los protagonistas, tú eres el invitado.
- Si tienes tiempo, añade una visita a un poblado masái o haz una caminata guiada. Es otra forma de conectar con el lugar.
- Deja espacio para la improvisación: los mejores momentos suelen ser los que no planeas.
Preguntas frecuentes sobre el safari en Kenia y Tanzania
¿Hace falta visado para Kenia y Tanzania?
Sí, para ambos países. El visado de Kenia se tramita online y el de Tanzania puedes hacerlo online o en el aeropuerto. Lleva siempre dólares en billetes pequeños para tasas y propinas.
¿Hay cobertura de móvil y wifi en los parques?
En la mayoría de lodges y tented camps hay wifi, aunque a veces lento. La cobertura móvil es sorprendentemente buena en muchas zonas, pero en mitad del parque olvídate de estar conectado todo el rato. Mejor: así desconectas de verdad.
¿Qué moneda se usa y cómo se paga?
En Kenia, el chelín keniano; en Tanzania, el chelín tanzano. En lodges y agencias aceptan dólares y tarjetas, pero lleva siempre algo de efectivo para compras pequeñas y propinas.
¿Qué vacunas son obligatorias?
La fiebre amarilla es obligatoria si vienes de un país donde es endémica (España no lo es, pero te la pueden pedir en tránsito). También recomiendan hepatitis A y B, tétanos y fiebre tifoidea. La malaria es endémica, así que consulta la profilaxis con tu médico.
Ruta recomendada para un safari de 7 días en Kenia y Tanzania
Para exprimir una semana y ver lo mejor de ambos países, te propongo esta ruta clásica:
- Llegada a Nairobi. Noche en la ciudad.
- Traslado a Masai Mara (2 noches). Safari y, si cuadra, migración.
- Cruzando a Tanzania por Isebania. Serengeti (2 noches).
- Ngorongoro (1 noche). Safari en el cráter.
- Tarangire o Lago Manyara (1 noche). Último safari.
- Regreso a Arusha o Kilimanjaro. Vuelo de vuelta.
Si tienes más días, añade Amboseli o una escapada a Zanzíbar para rematar con playa.
¿Merece la pena un safari para principiantes?
Sin duda. Un safari en Kenia y Tanzania es una de esas experiencias que te cambian la forma de ver el mundo. No importa si nunca has pisado África: la emoción de ver un león de cerca, la luz de la sabana al amanecer y el silencio solo roto por los sonidos de la naturaleza no se comparan con nada. Atrévete, planifica bien y lánzate. La aventura te espera.