Si viajas a Lima y no tienes claro dónde comer, prepárate para un festival de sabores que va mucho más allá del ceviche. La capital peruana es un paraíso gastronómico donde lo tradicional y lo moderno se dan la mano, y donde puedes encontrar desde puestos humildes con platos de escándalo hasta restaurantes premiados entre los mejores del mundo. Aquí te cuento dónde probar el mejor ceviche en Lima, cuáles son los restaurantes más top y algunos consejos para no perderte en el universo culinario limeño. Todo probado en primera persona, sin postureos ni cuentos chinos.
¿Dónde comer el mejor ceviche en Lima?
El ceviche en Lima es casi una religión. Si buscas autenticidad, apunta estos sitios donde el pescado fresco, el punto de acidez y el toque picante te van a hacer la ola.
- La Mar Cebichería (Av. La Mar 770, Miraflores): No es barato, pero el ceviche clásico de corvina aquí es de otra liga. El local siempre está animado y el servicio va al grano. Pide el ceviche mixto si quieres probar mariscos y pescado en la misma jugada.
- El Mercado (Hipólito Unanue 203, Miraflores): Gastón Acurio, el chef más famoso de Perú, firma este sitio. El ceviche es fresco, el tiradito de ají amarillo sorprende y el ambiente es relajado, ideal para una comida sin prisas.
- Canta Rana (Genova 101, Barranco): Un clásico de barrio, sin pretensiones. Aquí el ceviche de lenguado es pura Lima, y la leche de tigre te resucita después de una noche larga. Perfecto para quienes buscan sabor sin florituras.
- Punto Azul (Calle San Martín 595, Miraflores): Siempre lleno, pero merece la pena la espera. El ceviche tradicional y el de rocoto son apuestas seguras, y las raciones son generosas.
Consejo de amigo: en Lima el ceviche se come a mediodía, cuando el pescado está más fresco. No lo dejes para la noche, que pierdes la gracia.
Restaurantes top en Lima que no te puedes perder
Lima es la capital gastronómica de Sudamérica y aquí tienes algunos de los restaurantes más premiados del planeta. Si buscas experiencias únicas, reserva con tiempo y prepárate para disfrutar.
- Central (Av. Pedro de Osma 301, Barranco): Elegido varias veces mejor restaurante de Latinoamérica. Virgilio Martínez te lleva de la costa a la sierra y la selva en un menú degustación que es pura exploración. No es barato, pero es de esos sitios que se recuerdan toda la vida.
- Maido (Calle San Martin 399, Miraflores): Cocina nikkei, esa fusión brutal entre Perú y Japón. El menú degustación es un viaje de sabores y texturas. Si tienes poco tiempo, prueba el tiradito o el arroz con mariscos a la carta.
- Astrid y Gastón (Av. Paz Soldán 290, San Isidro): Otro imprescindible. Aquí la carta cambia según temporada, pero siempre hay platos creativos con raíces peruanas. El ají de gallina y la degustación de postres son de otro mundo.
- Isolina (Av. San Martín 101, Barranco): Cocina criolla en formato de taberna limeña. Porciones enormes, guisos de toda la vida y ambiente local. Perfecto para ir con hambre y probar desde el lomo saltado hasta el tacu tacu.
Reserva siempre que puedas, sobre todo en Central y Maido. Y si quieres comer bien sin dejarte el sueldo, la hora del almuerzo (menú del día) es tu aliada en muchos de estos sitios.
Comer barato y bien en Lima: mercados y huariques
En Lima no hace falta irse a los restaurantes más caros para comer de lujo. Los huariques (pequeños locales de barrio) y los mercados son el secreto mejor guardado de la ciudad. Aquí va mi selección para comer rico sin arruinarte:
- Mercado de Surquillo (Paseo de la República 510, Surquillo): Puestos sencillos donde puedes probar ceviche, causa limeña o chicharrón de pescado por menos de 5 euros. El ambiente es auténtico y el producto, fresquísimo.
- Al Toke Pez (Av. Angamos Este 886, Surquillo): Un local diminuto con fama gigante. Ceviche, arroz con mariscos y leche de tigre servidos al instante. Suele haber cola, pero el ritmo es rápido y el sabor merece la espera.
- El Chinito (Jr. Chancay 894, Cercado de Lima): Especialidad en sánguches peruanos. Prueba el de chicharrón con camote y salsa criolla. Perfecto para un desayuno o merienda contundente.
Si te gusta comer como un local, lánzate a los mercados y pregunta por el plato del día. La gente es amable y siempre te recomendarán lo mejor de la casa.
Preguntas frecuentes sobre comer en Lima
¿Es seguro comer en la calle en Lima?
En general, sí, siempre que el puesto tenga buena rotación de clientes y veas que todo está limpio. No temas probar ceviche o anticuchos en mercados conocidos. Eso sí, evita el agua del grifo y apuesta por bebidas embotelladas o chicha morada casera.
¿Cuánto cuesta comer en Lima?
Depende de dónde vayas. En un huarique o mercado puedes comer por 4-7 euros un plato generoso. En restaurantes top, el menú degustación puede irse a 80-150 euros por persona. En sitios intermedios, una buena comida ronda los 15-25 euros.
¿Qué otros platos típicos debes probar en Lima?
Además del ceviche, apunta estos imprescindibles: lomo saltado, ají de gallina, causa limeña, tiradito, arroz chaufa y anticuchos. Si te va lo dulce, prueba el suspiro limeño o los picarones.
¿Hace falta reservar en los restaurantes de Lima?
En los restaurantes famosos, sí o sí. En huariques y mercados, normalmente no hace falta. Si viajas en temporada alta (julio-agosto o diciembre), mejor prevenir y reservar aunque sea con un par de días de antelación.
Consejos clave para disfrutar la gastronomía limeña
- Ve con hambre: Las raciones suelen ser generosas, incluso en los sitios de moda.
- Pide recomendaciones: Los camareros suelen acertar y te pueden descubrir platos fuera de carta.
- No te la juegues con el agua: Mejor embotellada o bebidas locales preparadas en el momento.
- Prueba la chicha morada y el pisco sour: Dos bebidas icónicas que acompañan cualquier comida.
- Haz la sobremesa: En Lima se come despacio y se disfruta la charla. No tengas prisa.
En resumen, comer en Lima es una experiencia que va mucho más allá del ceviche. Hay propuestas para todos los gustos y bolsillos, y lo mejor es dejarse sorprender y probar de todo un poco. Si tienes poco tiempo, céntrate en Miraflores y Barranco, donde se concentran muchos de los mejores restaurantes y huariques. Y si puedes, alarga la sobremesa con un buen café peruano o un pisco sour mirando el Pacífico. Así es como se disfruta Lima de verdad.