Asturias es un paraíso para los amantes del queso, y si buscas una escapada diferente, auténtica y con mucho sabor, recorrer sus queserías es un planazo. Aquí no solo vas a probar quesos únicos como el Cabrales, el Gamonéu o el Afuega’l Pitu, sino que vas a conocer a la gente que los elabora, a perderte entre prados verdes y aldeas de postal, y a descubrir rutas que huelen a leche fresca y a tradición. Si eres foodie de verdad, apunta bien: esta ruta de queserías en Asturias es de las que se recuerdan (y se repiten).
¿Por qué hacer una ruta de queserías en Asturias?
Asturias presume de tener más de 40 variedades de queso con Denominación de Origen y marcas propias. Aquí el queso es cultura, orgullo y parte de la vida diaria. Hacer una ruta de queserías no es solo comer bien, es entender cómo se vive en los pueblos, cómo se cuida el ganado y cómo se respetan recetas centenarias. Además, muchas queserías ofrecen visitas guiadas, catas y talleres donde puedes ver el proceso de elaboración y preguntar todas tus dudas. Es una experiencia brutal para quienes buscan algo más que un simple viaje gastronómico.
Mapa imprescindible: las mejores queserías de Asturias (con visita)
Asturias está salpicada de queserías, pero si tienes pocos días, te recomiendo centrarte en tres zonas: los Picos de Europa (para los quesos azules), la zona central (para quesos suaves y cremosos) y el occidente (para quesos artesanos menos conocidos). Aquí van mis paradas favoritas, probadas en persona:
Quesería Vega de Tordín (Arenas de Cabrales)
Esta quesería familiar está en pleno corazón de los Picos de Europa. Hacen Cabrales de verdad, potente, con ese punto picante y aroma a cueva que lo hace inconfundible. Puedes visitar la quesería, ver la cueva de maduración y terminar con una cata maridada con sidra. Reserva antes porque se suele llenar.
Quesería Francisco Bada (Sotres)
En uno de los pueblos más altos de Asturias, Francisco Bada elabora Cabrales y Gamonéu con leche cruda de vaca, oveja y cabra. Si quieres ver cómo se hace un queso azul en un entorno de montaña de película, este es tu sitio. El trato es cercano y auténtico, y la cata, inolvidable.
Quesería La Peral (Illas)
Aquí el queso azul es más suave, cremoso y fácil de comer para todos los públicos. La visita incluye recorrido por la quesería y explicación de la historia familiar. No te vayas sin probar el queso La Peral con membrillo o en tosta caliente.
Quesería Rey Silo (Pravia)
Perfecto para foodies inquietos: aquí se elabora el famoso Afuega’l Pitu, un queso de vaca con forma de tronco o de calabaza, con versiones más o menos picantes. La visita es muy didáctica y puedes ver el proceso desde la leche hasta el envasado. Ojo, porque venden ediciones limitadas solo en la tienda.
Quesería Ca Sanchu (Taramundi)
En el occidente asturiano, Ca Sanchu hace quesos artesanos de cabra y vaca, todos con leche de pastoreo. El entorno es de cuento y la visita, muy casera. Si te gustan los quesos frescos y los ahumados, este es el sitio.
Consejos para organizar tu ruta de queserías en Asturias
- Planifica las visitas: muchas queserías solo abren bajo reserva o tienen horarios limitados. Llama antes y confirma.
- Lleva nevera portátil: vas a querer llevarte quesos a casa, y en verano es imprescindible para que aguanten el viaje.
- Pregunta y aprende: los queseros asturianos son auténticos, les encanta contar su historia y te van a recomendar otros productos locales (miel, sidra, embutidos…).
- Haz la ruta en coche: el transporte público llega a pocos pueblos. Si puedes, alquila coche y aprovecha para perderte por carreteras secundarias.
- No te quedes solo en la cata: busca queserías que incluyan visita a la cueva o al prado. Es otra manera de entender el producto.
Preguntas frecuentes sobre la ruta de queserías en Asturias
¿Cuándo es la mejor época para hacer la ruta?
Cualquier mes es bueno, pero la primavera y el otoño son ideales: los paisajes están verdes, hay menos turistas y los quesos de temporada están en su punto. En verano hay más ambiente y ferias, pero ojo con el calor para transportar los quesos.
¿Se puede hacer la ruta con niños?
Sí, la mayoría de queserías aceptan niños y algunas incluso tienen actividades especiales para ellos. Eso sí, hay que vigilar en las zonas de animales y respetar las normas de cada quesería.
¿Qué quesos asturianos no me puedo perder?
El Cabrales (para valientes), el Gamonéu (más suave y ahumado), el Afuega’l Pitu (ideal para untar) y el queso de La Peral (perfecto para iniciarse en los azules). Si te animas, prueba también el Casín y los quesos de Taramundi.
¿Dónde comprar queso asturiano auténtico si no puedo visitar las queserías?
Muchos queseros venden online y en mercados de Oviedo, Gijón y Avilés. Pero, sinceramente, la experiencia de comprarlo en la propia quesería, con el olor a leche y el trato directo, no tiene comparación.
Ruta recomendada para un fin de semana foodie en Asturias
Si tienes solo dos o tres días, te recomiendo esta ruta circular desde Oviedo:
- Viernes: Llega a Oviedo, date un homenaje en algún bar de quesos del centro y duerme en la ciudad.
- Sábado: Sal temprano hacia Arenas de Cabrales, visita Vega de Tordín y, si tienes tiempo, acércate a Sotres (Quesería Francisco Bada). Come por la zona (cachopo y queso, claro).
- Domingo: Vuelve hacia el centro y para en Pravia (Quesería Rey Silo) y en Illas (La Peral). Si te sobra tiempo, acércate a Taramundi antes de regresar.
No hace falta correr. Lo bonito de Asturias es ir parando, hablar con la gente, probar cada queso y dejarse sorprender por el paisaje. Si eres de los que buscan rutas auténticas y con sabor, esta escapada te va a enganchar. Y sí, volverás con la maleta llena de quesos, seguro.